#MullorAcosaYDespide no negocia

La empresa Mullor despidió a finales del mes de septiembre a nuestra compañera Gema después de una temporada de intenso acoso laboral durante la que intentaron cambiarla de puesto y de horario.

Gema trabajaba para Mullor desde 2015, año en el que fue subrogada desde otra empresa. Desde que empezó a trabajar nunca había tenido quejas de su rendimiento, faltas o problema ninguno con la empresa hasta que al volver en junio de la excedencia por cuidado de menores que había pedido en enero, al término de su baja por maternidad, desde la empresa se le informa de que su lugar de trabajo, su horario y su número de horas han cambiado porque su puesto ya está ocupado por otra persona.

Gema acudió acompañada por ADELA en dos ocasiones a hablar con su encargado y recordarle que en el caso de las excedencias por cuidado de menores de duración menor de un año la empresa está en la obligación de readmitir a las trabajadoras en las mismas condiciones en las que se encontraba antes de ésta, pero su encargado no pareció entender que la legalidad y los derechos de las trabajadoras están por encima de sus carencias organizativas y mantuvo su oferta de nuevas condiciones. Ante esta situación Gema no tuvo más remedio que acudir al SMAC (Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación) e interponer una reclamación contra la empresa por la modificación de las condiciones sustanciales del contrato. 

A los pocos días de interponer la reclamación, el encargado llamó a Gema para despedirla telefónicamente sin darle ningún tipo de preaviso ni de finiquito.

Desde ADELA, el grupo de apoyo mutuo laboral del barrio se ha acompañado a Gema en todo el proceso y se convocó un piquete la semana previa a la reunión de conciliación con la empresa con la intención de presionar para asistir y negociar los términos del despido. Sin embargo la empresa, aunque asistió al acto de conciliación, hace unos pocos días, se negó a hablar con la trabajadora.

La negativa de la empresa a negociar sólo implica que tendremos que continuar presionando por la vías que nos quedan, ya sea con la inspección del trabajo y demandas legales, como por la la vía de la presión popular y la movilización.

Aprovechamos para hacer un llamamiento a todas nuestras vecinas para que se acerquen a la asamblea de ADELA, estén atentas a nuevas convocatorias. Y que tengan presente que, desde su sede en nuestro barrio, en la c/ Avefría 1, #MullorAcosaYDespide a mujeres que acaban de ser madres y que simplemente ejercen sus derechos como trabajadoras.